Nicholas Arthur Frederick Edward Pembrook, Príncipe Coronado de Wessco, alias Su Calidez Real, es perversamente encantador, devastadoramente guapo, y descaradamente arrogante; difícil no ser cuando la gente se está inclinando constantemente hacia usted. Entonces, una noche nevada en Manhattan, el príncipe se encuentra con una belleza de cabello oscuro que no se inclina. En su lugar, le echa un pastel en la cara. Nicholas quiere averiguar si sabe tan bien como su pastel, y este heredero aparente está acostumbrado a conseguir lo que quiere. Salir con un príncipe no es lo que la camarera Olivia Hammond jamás imaginó que sería.
Hay una reina que desaprueba, un heredero de repuesto increíblemente inapropiado, paparazzi implacable y escrutinio público brutal. Mientras que han negociado en carruajes tirados por caballos para Rolls Royces, y no han cortado la cabeza de nadie últimamente, la realeza está lejos de aceptar este plebeyo. Pero para Olivia, Nicholas vale la pena. Nicholas creció con todo el mundo viendo, y ahora Marriage Watch está en plena fuerza. Al final, Nicholas tiene que decidir quién es y, lo que es más importante, quién quiere ser: un Rey ... o el hombre que puede amar a Olivia para siempre.
Algunos hombres nacen responsables, algunos hombre les agregan responsabilidades. Henry Charles Albert Edgar Pembrook, Príncipe de Wessco, acaba de obtener la reina de todas las responsabilidades tirada en su regazo.
No está lidiando con ello bien.
Esperando forzar a su nieto a que esté a la altura, la Reina Lenora se va a unas muy necesarias vacaciones en safari y cuando la reina está lejos, el Príncipe se pondrá a jugar. Después de una oportunidad de reunirse con un productor de televisión americano, Henry finalmente toma una decisión solo:
Bienvenido a Matched: Versión Real.
Un reality de Tv de citas presentando a veinte de las mujeres más hermosas de sangre azul reunidas en un mismo castillo. Solo una ganará la tiara de diamante, solo una capturará el corazón del guapo príncipe.
Mientras Henry goza de las travesuras sexys y atrevidas de las concursantes mientras pelean, literalmente, por su cariño, es la chica callada y con lentes de la esquina con la voz de un ángel y un cuerpo que tentaría hasta a un santo quien atrapa su atención.
Mientras más Henry conoce a Sarah Mirabelle Zinnia Von Titebottum, más enamorado se vuelve de su belleza simple, su fortaleza, su espíritu amable…y su travieso sentido del humor.
Pero Roma no fue construida en un día y la realeza irresponsable no es reformada de la noche a la mañana.
Mientras se empeña a corregir sus errores, viejas palabras toman un nuevo significado para el elegante príncipe. Palabras como deber, honor y sobre todo amor.